Una cita con la Lady

Primera y sorprendente novela de este autor mexicano nieto de García Márquez, capaz de fundir las ganas de desaparecer de un yonqui con los muertos de un pueblo que, como en Comala de Juan Rulfo en Pedro Páramo, tienen más presencia que los vivos y donde el tiempo no pasa y el narrador, muerto en vida, ya no sabe distinguir entre vivos y muertos. 

Fantasmas que le acompañan en un estremecedor viaje de autodestrucción elegida y planeada que debe acabar cuando no quede el menor resto de heroína, la Lady, su única y artera compañera, ni la posibilidad de encontrar más para la última y definitiva dosis. 

Metáfora de los estragos de la heroína narrada por una mente que, poco a poco, olvida que no está vivo. Un lenguaje hermoso y terrible.