La reducción de los daños relacionados con las drogas

Las políticas de reducción de daños empezaron a utilizarse a finales de 1988 en respuesta a la infección por VIH entre usuarios de drogas por vía parenteral y la sospecha creciente de que las estrategias adoptadas para tratar el consumo de drogas no habían mejorado sino empeorado el problema. Éste es el primer libro centrado en la reducción de daños. Estos programas aportan sensatez y tolerancia para afrontar con más éxito la “inevitable convivencia con las drogas y la reducción de algunos de sus problemas asociados”.