La vida secreta de los árboles
A pesar de la oposición de numerosos científicos a las tesis de “la inteligencia vegetal”, las plantas y los árboles se comunican y resuelven problemas para adaptarse desde la vida en el agua hasta extenderse por casi toda la Tierra...
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A pesar de la oposición de numerosos científicos a las tesis de “la inteligencia vegetal”, las plantas y los árboles se comunican y resuelven problemas para adaptarse desde la vida en el agua hasta extenderse por casi toda la Tierra. Las plantas carecen de cerebro, viven a un ritmo extremadamente lento y, aunque son seres vivos, se les trata como a cosas.
Los bosques no son solo fábricas de madera, ni almacenes de materias primas, sino que cuando se desarrollan libremente cumplen funciones muy beneficiosas, como que a partir de la hojarasca existen ácidos que al llegar al mar, por ríos y arroyos, estimulan el crecimiento del plancton, el primer y más importante eslabón de la cadena alimentaria.
La Constitución suiza establece “En el trato con anima-les, plantas y otros organismos, debe tenerse en cuenta su dignidad”.
Cuando se conocen las características de la vegetación, sus sensaciones y necesidades, es inevitable cambiar nuestra relación con las plantas.